lunes, 31 de enero de 2011

Tu ventana

La ventana estaba abierta,
así, que decidiste saltar.
Miraste un segundo hacia atrás.
Dentro de la habitación ya no había espacio para tu existencia.
Los muebles estaban destrozados,
hechos añicos. Todos sus trozos rotos andaban desperdigados por el suelo.
Las paredes sucias, roídas por el tiempo, aumentaban la oscuridad de aquel cuartucho.
No había puerta de entrada y salida,
Solo esa ventana.

Y no fue suficiente, el lazo que te unía a las cartas de amor guardadas con naftalina en tu mugriento mueblecito, de cuando tenías 20 años.
Ni el que te mantenía en vilo por las historias contenidas en los más de 1.000 libros ahora desechos, sin orden, por el suelo.
Los mensajes de amor escritos con sangre se clavaban como alfileres a la fina piel de tus manos. Y tuviste que arrancarlos uno a uno. Sangrabas. Pero aquello suponía una liberación.
Te quitaste toda la ropa, quedándote desnuda ante la ventana.
No importaba nada, solo lo que había tras ella.
Te encaramaste y saltaste.
Desde un octavo piso.

Y, al fin: fuiste libre.

domingo, 30 de enero de 2011

¿Estábamos vivos?

Las revueltas en ese sur al que miramos tan poco nos están dando un ejemplo claro de que estamos vivos, de cómo las personas tenemos capacidad para cambiar cosas que parecen legítimas, por el simple hecho de existir desde hace años, a pesar de que sean injustas y mantengan a los más humildes sumidos en la pobreza y la desesperación permanentes.
Pienso,  que deben hacernos reflexionar sobre nuestra capacidad y sobre hacia dónde queremos ir, vivamos donde vivamos, porque las injusticias desgraciadamente, se encuentran en todas partes.

jueves, 27 de enero de 2011

viernes, 21 de enero de 2011

pues eso

martes, 18 de enero de 2011

Mi hilo dental lunar

Cuando la luna cae rompiéndose en pedazos en la misma puerta de tu casa,
Yo, ya no soy yo.

El hilo dental que me une a ella también quedó deshilachado, sin tiempo. Desvencijado, como los cráteres de su alma.

Ahora, voy con los dientes sucios por las esquinas, sin consuelo, busco y busco…para nada.

Pero …esta mañana, al romper el huevo que me regalaste la clara manchó mis manos y un rayo de sol impregnado, pareció de luna.

Con su brillo, de golpe, mi casa quedó iluminada, de luces cósmicas de luna acabada de nacer.

Las promesas cobraron cuerpo y las sábanas de mi casa, volvieron a oler a moras cogidas en las primeras horas del alba.

sábado, 15 de enero de 2011

martes, 11 de enero de 2011

Tengo un almirantito

Tengo un almirantito
dentro de mi corazoncito.
Y en mi bonito bolso, una espadita y un torpedicito

Ay¡ que me atraganto¡
Sin miedo, sin espanto.

Yo, soy la muerte, la novia fiel de aquí te espero
La que nunca falla, mi soldadito
La que siempre has querido, atada y tenebrosa muy a tu ladito.


……Soy un hombre a quien la suerte

hirió con zarpa de fiera;

soy un novio de la muerte

que va a unirse en lazo fuerte

con tal leal compañera.(Canción legionaria)

lunes, 10 de enero de 2011

Purpurina de colores gratis

Sus manos estaban heladas. Ella las cogió entre las suyas, calentitas en el interior del coche, mientras él hacia una verdadera fiesta por verla.
Hacía más de un año que no se veían, siempre en aquel semáforo, él vendiendo clínex para narices secas por la rabia y el miedo, y ella estresada, tensa, con los ojos pegados a la próxima luz verde con la que pisaría el acelerador a toda pastilla para llegar al trabajo.


Al verlo hoy las dudas se disolvieron como un azucarillo en agua tibia, pero sintió una desdicha aún mayor al darse cuenta de que lo que buscaba era tan sencillo que había pasado desapercibido ante sus mismísimas narices.Lo tenía justo en frente, era el aliento vital, la calidez que no se compra con nada, algo sencillo, precioso, que solo pueden ofrecer unos pocos y que él altruistamente, en un instante se lo había regalo, introduciéndolo en su coche con su brillante mirada.

domingo, 9 de enero de 2011

Puff nosostros aquí y ellos en el Polo Sur

La Base Amundsen-Scott es una estación antártica de los Estados Unidos, que se encuentra casi en el Polo Sur Geográfico. Este es el lugar más meridional del planeta que está continuamente habitado. Su nombre honra a Roald Amundsen y a Robert F. Scott, que alcanzaron el Polo Sur en 1911 y 1912.


La estación ha sido reubicada y reconstruida varias veces, en 1975 se creó una cúpula geodésica de 50 m de diámetro de ancho por 16 de alto, con un arco de entrada de 14 m × 24 m hecho de acero, construcciones modulares, cámaras de aire con combustible y equipamiento.

La base también incluye el «skylab», un bloque con forma de torre ligeramente más alto que la cúpula y accesible por túnel. El «skylab» albergó el equipamiento de un sensor atmosférico y, más tarde, una sala de música.

En 1999 se construyó una nueva estación, junto a la cúpula, y se caracteriza por estar elevada y tener altura ajustable (con el fin de prevenir que la estación sea enterrada por la acumulación de nieve) y tener diseño modular (que permite aumentar la población que puede ser alojada).

Durante el verano la población de la base llega a aproximadamente 200 personas. La mayoría del personal se retira en febrero quedando solo algunas decenas durante el invierno austral. Los que permanecen son su mayoría personal de apoyo y algunos científicos que se encargan de mantener la base operativa durante la noche antártica. El personal de invierno se encuentra aislado desde mediados de febrero y hasta finales de octubre.



Enlace a fotos

http://www.nsf.gov/news/special_reports/livingsouthpole/allphotos.jsp

Enlace a la web de la base

http://www.nsf.gov/od/opp/support/southp.jsp

viernes, 7 de enero de 2011

NO PENSAR

jueves, 6 de enero de 2011

Mi serpiente

Sueño con la serpiente de piel suave.

Me rodea sin apretarme

desenvolviendo caricias, como aire cálido, alrededor de mi cuerpo.

Llevo su respiración cerca de mi cuello.

Pongo mi mano sobre mi serpiente y ésta se desplaza, sobre mi cuerpo, lentamente.

Yo no kiero kedarme con tus llaves, solo kería bailar

martes, 4 de enero de 2011

Sentimientos bajo cero

No tienes por qué sentir nada.


Puedes levantarte mañana, tomar tu medio litro de café y andar por la calle hacia el trabajo, como si nada sucediese en tu interior.

Puedes apilar las quejas, el dolor, las dudas, los pensamientos revueltos repetidos una y otra vez, para que tu rostro parezca tranquilo, como si hubieses acabado de comer un gran plato de paella al aire libre, en un domingo soleado.

No tienes que escupir ningún maldito sentimiento,

Todos los tenemos pero, por alguna misteriosa razón, nos esforzamos en taparlos con todos los trastos que podemos. Maquillaje, risas, conversaciones banales o pensamientos robados de la boca ajena.

No tienes por qué sentir nada, sencillamente da igual, todos sentimos lo mismo, aunque de forma absurda y misteriosa, nos esforzamos en hacer sentir al otro, que sencillamente no sentimos nada.

¿Voluntarios para contener esto?

Porque en definitiva: agua es lo que somos...


¿quién es el valiente?