Los pilares de la ciudad

Pensamiento,

sentimiento,

sensación.

Los tres pilares de la ciudad. Calles llenas de pensamientos andantes, mezclados todos ellos con sentimientos como el amor, el placer, la nostalgia, el deseo, el miedo, la pasión, la ira o el dolor, mezclados todos ellos con sensaciones de placer, de dolor, de miedo, piel erizada, ardor estomacal, aire fluido que entra y sale dulcemente por tus pulmones, pulso rápido…

Todo mezclado y remezclado,

en una red tupida de pensamientos, sentimientos y sensaciones, activados cada día por un gran tazón de café con leche.

pensamiento constante

pensamiento constante
UNO, no vacilar
pensamiento constante
DOS, permanecer
pensamiento constante
TRES, no caer
pensamiento constante
CUATRO,resistir
pensamiento constante
CINCO, ¿vivir?

Efecto NO-Creamfields

Esta prueba empírica me ha demostrado que no asistir al Creamfields también produce dolor de cabeza,
el vacío musical tiene sus efectos negativos en el organismo.... (los positivos me los guardo para mí).

Duermo

                                                                                    Las horas dulces de esta noche

movían mi pelo.

Enredado entre hojas vivas

parecía más ligero,

un haz de fuerza

capaz de superar cualquier límite.

Los caballos, mientras, abrazados,

besándose, trepándose el uno al otro, agitaban mi sueño,

mi respiración…..

quiero seguir durmiendo.

Ojos abiertos

Es difícil romper a llorar cuando debo tener los ojos tan abiertos.

Ser sensible

cuando todo alrededor me dicta puertas y puertas y puertas.

Es difícil ser sencillamente lo que soy

cuando nunca, nunca, nunca

 podré dejar de serlo.

Hombre-vacío

Sé que todos están fuera.

La ciudad es sólo para mí,

sus calles, aparcamientos, 

espacio en las tiendas, en el banco de mi plaza.

Vuelo sobre esta ciudad, que ahora, abismal, es mía.

No hay palabras 

solo casas, calles, aparcamientos y ese banco en el que ya nunca me siento, en mi plaza,

esa, que como el hombre, hoy, está vacía.

Ah¡ fantasmas

El miedo a los fantasmas nace en la barriga, sube hasta tu pecho y obnubila tu razón.

No tienen nombre, ni esencia, ni casa, ni vida.

Si los miras a los ojos  

será tu perdición.

Con romero y salvia 

he perfumado mi casa,

para salgan corriendo

de miedo  a la luz.

Así 

respiraré sin temor.

La puerta del calor

Hoy, veía puertas en  los caminos establecidos.

Caminaba junto a la muralla y de golpe, ahí estaban.

Solo tenía que dar dos pasos para cambiar mi destino,

hacia otra vida.

Cruzar una puerta invisible pero muy tangible, abierta de par en par ante mis ojos.

Y dejarme caer en el sofocante calor de las tres de la tarde,

como si de una suave cama se tratase.