lunes, 19 de julio de 2010

Sin compulsión

El sonido de tu alma vaga por los espacios de ésta, mi casa.
Suena Air…

Entre los papeles encuentro lágrimas sin nombre
y las apilo sin concierto sobre la mesa, para no llegar a ningún sitio.

Los rayos de sol caen sobre la tierra con un ángulo picudo que hace sangrar mi hombro izquierdo.
Ya no me quedan tiritas y me coloco un folio, con la última poesía que escribí sin sentido.

Queda colgada de mis extrañas ideas, mezcladas con sentimientos resistentes al tiempo y a los lavados de ropa.
Respiro profundamente para guiarme por el olor de esta tarde, pesada y calurosa como tantas otras.

Mi calle parece infinita…y sigo las notas sin rumbo, ni futuro.

4 comentarios:

Emilio Calleja dijo...

Llego la calima silenciosa!

Anónimo dijo...

k peligro emili¡¡¡¡k lleguen ya las vacaciones¡¡¡kilo

Emilio Calleja dijo...

Me voy a New York!!!!

Kilometrica dijo...

Uhaaaagggg¡¡¡yo tambiénnnnnn¡¡¡¡